Boels Rental ha adquirido la empresa especializada Chemelot Safety Shop, con sede en los Países Bajos. No se han revelado detalles financieros de la transacción.
Con sede en Sittard-Geleen, en el sur del país, Chemelot está siendo vendida por su propietario Sitech. La empresa se centra principalmente en el alquiler, venta y mantenimiento de detección de gases, soluciones de aire respirable y ropa de protección.
Boels afirmó que con la adquisición de Chemelot, que se une a Boels Industrial, la división de alquiler especializado de Boels Rental para el sector industrial y petroquímico, la empresa se convertirá en un “especialista en el campo de equipos de seguridad industrial”.
Según Boels, las actividades y la base de clientes de Chemelot “coincidirán óptimamente con Boels Industrial” y permitirán a los clientes de Chemelot beneficiarse del acceso a una “gama especializada aún mayor”.
También expande su presencia geográfica en el espacio industrial a 18 ubicaciones, con la empresa operando sucursales existentes en los Países Bajos, Bélgica y Alemania.
Reiant Mulder, COO de Boels Rental, dijo: “Esta extensión enfatiza nuestra promesa de ser el socio de alquiler de soluciones integrales para nuestros clientes, incluso en el sector industrial altamente especializado donde la seguridad es primordial.”
Según Robbert Willemsen, director general de Boels Industrial, la proximidad de la empresa a sitios industriales importantes cercanos jugará un papel importante en el crecimiento futuro. “Estar en el sitio o cerca del sitio maximiza el tiempo de actividad para los clientes con disponibilidad óptima de equipos y servicio 24/7 por expertos certificados. La extensión posiciona perfectamente a Boels para un mayor crecimiento en el sector industrial especializado”, añadió.
La adquisición es el último movimiento especializado que Boels ha llevado a cabo. En marzo, la empresa anunció que estaba comprando la empresa neerlandesa de alquiler de plataformas aéreas Riwal, creando una flota combinada de 55,000 plataformas aéreas y convirtiéndola en la propietaria de la segunda flota de plataformas aéreas más grande de Europa y la sexta más grande del mundo.
