La firma valenciana GUIL, que lleva fabricando elevadores desde 1983, ha ampliado sus instalaciones y ha ampliado la robotización en los procesos de producción y montaje.
De esta manera, ha conseguido reducir considerablemente el coste de sus fabricados haciéndolos aún si cabe más competitivos.
Gracias a la amplia gama de modelos y adaptadores, los elevadores de carga GUIL se pueden utilizar en multitud de sectores (vidrio, construcción, carpintería metálica, logística, climatización); teniendo una gran variedad de aplicaciones: instalación de ventanales, de puertas, revestimientos de fachadas, paneles, rótulos, rejas, etc., convirtiéndolos en un complemento indispensable para cualquier instalador.
GUIL fabrica más de 30 modelos de elevadores, con alturas de hasta 8 metros y capacidad de carga de hasta 440 kg. Gracias a su utilización el instalador aumenta su productividad con un significativo ahorro de tiempo y, en consecuencia, una reducción en costos, garantizando siempre su seguridad.
La línea de carga frontal, serie TORO, cuenta con más de 19 referencias de elevadores, ofreciendo al profesional un amplio abanico de posibilidades. Todos ellos se suministran “fully equiped”, incluyendo de serie todos los componentes:
> Estabilizadores laterales abatibles, provistos de ruedas con husillo nivelador.
> Horquillas ajustables, desmontables y reversibles.
> Patas desmontables con diseño telescópico, provistas de ruedas con husillo nivelador.
> 12 Ruedas para poder transportar el elevador tanto en posición vertical, como en horizontal y para una cómoda y rápida carga en vehículos.
Cabe destacar el especial diseño de su base, que permite colocar las patas en la parte trasera o frontal del elevador, pudiendo así acercar la grúa a la pared para aquellos trabajos que lo requieran o colocar las patas en la parte frontal y realizar trabajos de mantenimiento, logística, instalación de conductos, equipos de climatización, ect…
Las grúas TORO son extremadamente robustas pero muy ligeras, con diseños compactos para un fácil manejo y transporte incluso en pequeñas furgonetas.
Un rasgo esencial de estas máquinas es la durabilidad en el tiempo, ya que aún se ven elevadoras GUIL a pleno rendimiento de hace más de 30 años, lo cual dice mucho de la calidad de los productos que fabrican.
Casi 40 años de experiencia hacen de GUIL una empresa internacional, que opera en todos los continentes y que está constantemente desarrollando novedades (nos consta que en breve nos van a dar alguna sorpresa…).