GRÚAS TOMAS, S.L.
Mov.- ¿Han adquirido maquinaria este año?
Este es un año donde no queríamos plantearnos ninguna compra que atendiese al furor del mercado, a la demanda que nos suscita nuestros clientes, entre otras cosas, porque el mercado apuntaba a una inflexión de la demanda, de ahí que nos hemos ceñido tan solo adquirir vehículos para renovar el parque.
Concretamente hemos adquirido tres grúas autopropulsadas de 100 ton, de 70 ton y 40 ton. Por otra parte, en el sector del transporte se han adquirido dos cabezas tractoras y por lo que corresponde a grúas articuladas, hemos firmado los pedidos para que en breve nos entreguen una grúa de 160 ton y otra de 60 ton con sus dos camiones de cuatro ejes.
Mov.- ¿Qué tipo de máquinas?
En grúas autopropulsadas han sido las tres Liebherr, las cabezas tractoras de la marca Man y las grúas articuladas de la marca Effer sobre camiones Volvo.
Mov.- De las nuevas máquinas, ¿qué te gustaría destacar de ellas que te haya convencido a la hora de adquirirlas?
La fiabilidad de los equipos y el servicio post venta ha sido la condición tomada en mayor consideración, también con el propósito de atenuar las averías que dispongamos un teléfono de contacto para dar soluciones a ciertos errores del software, o bien que podamos formar a nuestro personal para dar soluciones sin llegar a ser ingenieros. De la misma, intentar que los equipos no tengan que ser dependientes de un sistema que nos comprometa en cada una de las pequeñas averías, a pasar por el proveedor.
Mov.- ¿Estás satisfecho con cómo se está desarrollando el año para tu empresa?
Sí, ha sido un año para firmar que se repita, aunque en principio deberíamos tener en cuenta que en el último trimestre ha bajado algo la demanda, con lo cual deberemos de confiar que los políticos nos ayuden, lo cual creo que lo tenemos muy difícil que reviertan dicha situación.
Mov.- A la hora de toma de decisión al adquirir maquinaria, ¿qué factores tienen en cuenta?
Máquinas fiables, buen servicio post venta, que actúen de forma rápida ante una avería.
Que sean empresas innovadoras para que en un futuro inmediato podamos tener el control de todos los parámetros de los equipos, bien desde un portátil o bien desde un móvil, de tal forma que inclusive podamos paralizar una maniobra si así lo decidimos. Vamos, lo que viene a ser acercarnos a la industria 4.0.
Mov.- ¿Prima el precio por encima de cualquier variable?
No creo que sea la condición que nos decline por un vehículo u otro. La verdad, es que están todos muy parejos y atiende más a su proyección y cobertura en el presente y en el futuro.
Mov.- ¿Estás satisfecho con los proveedores del mercado que forman el sector?
Sí, en principio no echamos en falta algún proveedor, quizá sería apropiado para el mercado que hubiesen más talleres que estuviesen más especializados con la hidráulica y con electrónica. Aunque esto es muy complicado.
Mov.- ¿Qué aspectos del sector crees que pueden ser mejorables?
Entiendo que si no somos capaces de incrementar el precio de venta, porque el compañero te lo compromete al rebajar las condiciones, entonces deberíamos de aprender a gestionar nuestros costes y con esto me refiero a no crear una escalada de los costes salariales porque al fin y al cabo es la partida que más nos condiciona el balance.
Mov.- ¿Prefieres tener en tu parque más de una marca? ¿Por qué?
Cada marca tiene una peculiaridad con un desarrollo tecnológico diferente, con unas innovaciones más prácticas a cada mercado, con lo cual en la variedad podemos encontrar aquello que nos solicitan en nuestro entorno de trabajo.
Mov.- ¿Cuál ha sido la media de ocupación de tu parque?
Entre el 70 y 80 %, dependiendo de las épocas.
Mov.- ¿Cómo ve el mercado de cara a final de año y el que viene?
El mercado está repleto de liquidez y creo que las grandes empresas, no están por la labor de mejorar resultados a partir de una toma de riesgo, por otra parte, el consumo interno cada vez es más discreto.
Estos condicionantes, en el futuro nos pasarán factura. Tampoco vemos ingenieros que quieran inventar algo para fabricar, tan solo para crear aplicaciones y software y demás, pero esto no distribuye riqueza.
Además, los gobiernos bien sean europeos o menos los nacionales, no disponen de ideas para incrementar el gasto y que de esta forma se reparta el trabajo.
