El contratista surcoreano Bong-Hwang recibió su grúa todo terreno Grove GMK5250XL-1, tras una ceremonia de entrega en la fábrica de Manitowoc en Wilhelmshaven, Alemania, a principios de este año. La grúa, de 250 t de capacidad, se adquirió con varias características opcionales, entre ellas un plumín abatible de 17,8 m, un polipasto auxiliar autoelevador y un kit de desmontaje de la pluma.
La nueva grúa ha sido enviada a su primer trabajo, la instalación de losas prefabricadas de hormigón de 3 t en una nueva planta química para el gigante industrial Han-Hwa en Eumseong, a unos 100 km al sureste de Seúl. Bong-Hwang se apresuró a reconocer las ventajas de la grúa de cinco ejes en este proyecto, con la pluma más larga de su clase, 78,5 m, y una huella compacta.
“Las plantas químicas como ésta suelen tener calles muy estrechas, por lo que una grúa compacta que pueda igualar o superar a modelos más grandes era la única solución para este proyecto”, explica Lee Guan-Hwi, CEO de Bong-Hwang. “La maniobrabilidad que ofrece el tren de rodaje 10x6x10 MEGATRAK® y el corto voladizo trasero de 5,2 m se prestan a maniobrar en estos estrechos lugares de trabajo industriales, incluso con un contrapeso completo de 80 t”.
“La eliminación de la necesidad de instalar o retirar repetidamente el contrapeso también nos ahorra mucho tiempo valioso. Y la posibilidad de elegir entre cinco posiciones de balancín hace que la preparación en espacios reducidos sea más rápida y sencilla. Trabajando en un radio de 30 m, extendemos la pluma hasta 70 m, y las losas de hormigón de 3 t pueden manipularse fácilmente”.
La GMK5250XL-1 se une a una GMK5120L en la flota de Bong-Hwang. Bong-Hwang se fundó en 2012 y se centra en proyectos de construcción y renovación de fábricas. La zona de Eumseong es un centro de fabricación de semiconductores, y muchos de esos fabricantes son importantes proveedores de Samsung.
“Esperamos que nuestro nuevo GMK5250XL-1 se mantenga increíblemente ocupado durante los próximos años, pero definitivamente no le pedimos demasiado”, concluyó Lee. “Durante nuestra visita a Wilhelmshaven, aprovechamos para visitar las instalaciones de fabricación y nos impresionó la increíble atención al detalle que se dedica a la producción de cada máquina. Ahora sabemos que es lo bastante resistente como para aguantar todo lo que le echemos”.
