La empresa sevillana que dirige Rafael Fernández sigue apostando por su crecimiento y para ello necesita aumentar su superficie de almacenaje y unas oficinas mayores. Su primer gran centro logístico ya está prácticamente listo para su apertura.
La empresa andaluza especializada en la importación, exportación y distribución de baterías -conectando directamente a fabricantes y grandes tiendas de recambio y accesorios-, tiene lista la primera fase su nuevo centro de operaciones logísticas en Sevilla, concretamente en Alcalá de Guadaíra, a pie de la A-92 y con enlace directo con las circunvalaciones SE-30 y SE-40.
Este complejo, que será el más importante del sector de la región y uno de los más grandes a nivel nacional, permitirá a la empresa fundada en 2014 por su actual consejero delegado Rafael Fernández, afrontar los objetivos de crecimiento marcados en el medio plazo y en la que ha invertido algo más de un millón y medio de euros. “En los próximos tres años, nuestros planes de crecimiento pasan por duplicar nuestra facturación”, ha comentado Fernández a EXPANSIÓN. La compañía, que se encuentra en el podio de los distribuidores de España con 250.000 baterías vendidas en 2021, unos 11 millones de euros de facturación, tiene el objetivo de superar las 300.000 unidades este ejercicio, unos 15 millones de euros facturados.
La palanca de crecimiento de CEMA Baterías es, hoy por hoy, el universo de las baterías para vehículos (arranque) ya que alrededor de las dos terceras partes de su volumen de negocio provienen de este. El futuro a medio plazo pasa por ir reduciendo esta ratio (que sea un 50% en 2023) en favor otros sectores como, por ejemplo, la acumulación de energía de producción solar o la movilidad, si perder volumen total de ventas ya que la previsión de ventas de baterías para vehículos es que sea incluso mayor en términos absolutos de cara a los próximos años. En este sentido, la compañía sevillana cerró hace unas semanas la adquisición de una parte importante del accionariado de Algebat, una empresa con sede en Algeciras, especializada en la distribución y montaje de instalaciones solares industriales para autoconsumo.
CEMA Baterías facturó el pasado ejercicio un 14% fuera de España y la empresa espera que este porcentaje sea de un 20% a final de este año 2022 y con la previsión de llegar al 30% el año que viene.
Dos fases
Esta primera fase del centro logístico consta de 3.000 m2 de almacén y 500 m2 de oficina. “Con ella estaremos preparados para albergar casi 300.000 baterías y cuando las necesidades sean mayores comenzará la segunda fase, donde llegaremos a los 5.000 m2 de almacén”, comenta el Sr. Fernández, que ha diseñado el desarrollo de esta segunda fase para que les “permita operar con total normalidad” en el día a día y así no verse “obligados ni a parar ni a hacer nuevas mudanzas”, matiza.
“La logística hoy en día es ágil, es por ello que nuestra intención no es acumular puntos de almacenamientos diferentes”, comenta el Sr. Fernández. La empresa, junto a la sede central sevillana, tiene almacenes logísticos en Portugal, Tenerife y uno en Algeciras con el foco en el sector solar. “Intentamos que la capacidad de cada uno de ellos contenga el almacenamiento físico necesario para abastecer a todo el país y en su caso, a todas las islas y la región”. Con estas nuevas instalaciones, CEMA Baterías abandonará paulatinamente los 5 almacenes que ha tenido que ir ocupando a medida que la empresa y su crecimiento lo ha requerido. “Por el momento no abriremos más puntos de almacenamiento en el continente europeo, el siguiente paso sería fuera del continente, pero eso todavía no está en los planes”, puntualiza.
Con negocio en hispanoamérica (México, Venezuela, Chile y Colombia), África (Marruecos y Sudáfrica) y Europa (en último mercado abierto ha sido Finlandia, que se suma a Italia, Francia, Países Bajos, Grecia y Alemania), CEMA Baterías opera también directamente en Portugal gracias a su asociación con ESA Baterías y cuenta en su porfolio, además de con su propia marca, con firmas como Mombat, Varta, Exide, Intact, Trojan, TeckEurope y Ozonnyx, especializada en acumulación de energía para la generación solar o eólica de tamaño medio.
Futuro
“Estamos muy centrados en la expansión internacional del negocio”, subraya el Sr. Fernández. Es por ello que el siguiente paso de la empresa será crear una red de ventas sólida fuera de España “que represente nuestros productos y marcas” y en paralelo, “dedicar recursos” a la diversificación de productos. Para Fernández, la batería es un producto “totalmente al alza, y cada vez más aplicaciones necesitan de este bien que podríamos denominar como de primera necesidad”.
“Drones que trasladarán a personas u objetos, la ropa inteligente, cualquier tipo de robot que vaya a ejecutar cualquier acción al servicio de las personas… Fernández va un paso más allá en cómo ve el futuro: “El vehículo eléctrico es ya una realidad, que llevará la velocidad que se le permita, yo hablo de muchas otras aplicaciones que cada vez dependen más de una batería”.
“La batería finalmente será un ‘commodity’. Así que su futuro es más que bueno, es vital”.
Fuente: Expansión