La Asociación de Ferias Españolas (AFE) y la Asociación de Palacios de Congresos de España (APCE) han decidido sumar esfuerzos para solicitar ayuda del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo con la finalidad de paliar los efectos de la crisis generada por el COVID-19 y retomar lo antes posible la actividad ferial y congresual española, motor de crecimiento de muchos sectores y de tracción de negocio internacional.
Ambas asociaciones, que tienen un acuerdo de colaboración suscrito en 2017, estiman que se han cancelado o pospuesto en España más de 190 ferias y 270 congresos, así como muchos otros eventos. En Europa, en el ámbito ferial exclusivamente, la situación afecta a más de 3.300 ferias canceladas o aplazadas y el daño económico causado solamente por las ferias canceladas, según lo previsto hasta finales de junio, será de 28.800 millones de euros.
Al respecto, el Presidente de la Asociación de Ferias Españolas, Xabier Basañez, ha manifestado que “ante una situación tan preocupante como la que estamos viviendo, nuestro sector, como parte relevante del turismo MICE, debe estar unido y transmitir a la Administración la necesidad de apoyo decidido para poder subsistir y seguir asumiendo nuestro papel de motor de desarrollo para aquellos sectores que ayuden a activar nuevamente la economía y el crecimiento del país”.
Por su parte, el Presidente de la Asociación de Palacios de Congresos de España, Iker Goikoetxea, ha declarado que “los congresos y reuniones son muy importantes en el panorama español, y no sólo en términos económicos sino también como eje vertebrador de todo un ecosistema de valor añadido conformado por centros tecnológicos, de I+D+i, médicos, y de otra índole. Sin duda, merecen el respaldo de los poderes públicos en momentos trascendentales como éste para garantizar su continuidad”.
Las ayudas solicitadas son de diferente naturaleza:
– Ayudas para expositores/patrocinadores y visitantes de las ferias, congresos y otros eventos, entre las que cabe destacar las líneas de financiación ICO para acometer los gastos de participación en ferias comerciales, congresos u otros eventos o la desgravación fiscal en el Impuesto de Sociedades a las empresas que participen en los mismos.
– Ayudas para los recintos feriales, palacios de congresos y organizadores de eventos externos, por el sobreesfuerzo inversor que precisarán una vez se supere esta situación. Se han solicitado ayudas que sobre todo puedan trasladar a sus proveedores y clientes, mediante la cobertura de gastos, organización de misiones comerciales, o para asumir gastos de comunicación y marketing, entre otros.
-Ayudas para acciones sectoriales conjuntas, es decir, destinadas a desarrollar una importante campaña conjunta de comunicación post crisis, para incentivar a las empresas y profesionales y que vuelvan a invertir en las ferias, congresos u otros eventos, como instrumento de marketing, de transmisión de conocimiento, de motivación de sus equipos, etc.
– Y, por último, ayudas para los proveedores de servicios en las ferias comerciales y congresos, también representados en ambas asociaciones. Se trata de empresas fuertemente dañadas por las cancelaciones y aplazamientos, que precisan apoyo a través de desgravaciones fiscales, ERTEs, flexibilidad laboral, subvenciones y líneas de crédito, entre otras.
La actividad ferial y congresual ha sido una de las primeras en sufrir la crisis por el cese inmediato de la mayoría de los eventos programados en todas sus instalaciones. Especialmente a partir de la segunda semana de marzo comenzaron a cancelarse o aplazarse prácticamente todos los eventos desde ese mes hasta junio. Las pérdidas en el sector son muy cuantiosas.
Además, este escenario genera un claro efecto dominó para muchos otros sectores relacionados (alojamiento, restauración, viajes, transportes, montaje de stands, audiovisuales, azafatas e intérpretes, iluminación y sonido, servicios diversos, ocio y muchos otros). Las entidades que participan en la organización de ferias o congresos y las firmas expositoras/patrocinadoras y los proveedores están sufriendo un grave perjuicio. Por otra parte, la falta de actividad de las empresas frenará su capacidad de inversión.
La Asociación de Ferias Españolas (AFE) y la Asociación de Palacios de Congresos de España (APCE) representan, respectivamente, a los principales recintos y organizadores de ferias comerciales y a los palacios de congresos en nuestro país, uno de los más destacados de Europa en las dos actividades. La suma de ambas genera un impacto económico inducido anual de más de 12.000 millones de euros y supone miles de empleos directos e indirectos.