Cada vez estamos en un mercado más competitivo, las empresas requieren una buena planificación financiera para continuar trabajando. Os traemos un artículo de IDF sobre algunos consejos que parecen obvios, pero hay que tener en cuenta.
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“Porque financian activos que generan caja a largo plazo con fondos a corto plazo, esto es el resultada de una mala planificación financiera. Cogen un préstamo participativo para invertir en I+D+i y cuando llega la hora de pagar la primera letra, no hay dinero y entonces tienen que cerrar. ¿Por qué? Porque no se respeta la regla de oro: equilibrio entre ingresos y gastos”, esta es la respuesta que Antonio Manzanera, autor del libro Finanzas para emprendedores, plantea.
La planificación financiera es clave para el buen devenir de cualquier empresa, sin una buena organización aunque haya una idea brillante el resultado suele ser malo. Por ello hay que planificar bien los flujos de caja, revisar periódicamente las cuentas, negociar bien las condiciones financieras con las diferentes entidades y, siempre que se pueda, financiarte con proveedores y clientes (la deuda no tiene por qué ser siempre vía banco).
En este sentido os damos algunos consejos para que la financiación de tu empresa no se convierta en un quebradero de cabeza:
1. Elabora un buen estado de tesorería
Las empresas no ganan dinero desde el primer mes, al principio suele ser necesario realizar inversiones que a medio o largo plazo traen beneficios. Pero regla número uno: ninguna empresa dispara su facturación en el primer mes. Andrés Saborido, country manager de Wayra España, afirma que “solo dos de cada diez startups llegan al quinto año de vida, y menos aún logran cumplir con los objetivos marcados inicialmente”.
Hay que contar con los gastos de alquiler, personal, licencias, aprovisionamiento de mercancía, etc., buscando siempre equilibrio entre ingresos y gastos. “Todo el mundo cuenta con estar facturando el primer mes y no tienen en cuenta los periodos de cobro de los clientes. Un cliente que te pague a 30 días no suele ser lo habitual”, señala Sergio Osuna, director de IDF All Financing.
En este sentido es recomendable realizar mensualmente informes de caja. Un excell en el que se incluyan datos como, por ejemplo, el balance inicial y el balance final de todas las cuentas y los gastos, para evitar así tensiones de tesorería.
2. Analiza tus costes por proyecto
Para hacer una buena gestión de la tesorería es imprescindible dedicar tiempo a hacer un buen análisis de costes. Influye el tipo de sector al que se dedique la empresa, así en consultoría y empresas de software se tiene que hacer un buen diagnóstico para ajustar bien precios y evitar problemas de cash flow.
3. Incrementa un 10% tus necesidades financieras
Cuando calcules tus necesidades financieras es aconsejable incrementarlas entre un 10% y un 15% para imprevistos. Así podrás afrontar gastos, sin que supongan un desequilibrio en el balance, y si las cosas van bien, tienes mayor margen de tesorería.
4. Cobra antes a tus clientes
Para evitar una dependencia excesiva de los proveedores financieros, sea financiación tradicional o alternativa, es recomendable que algunos de nuestros clientes se conviertan también en “fuentes de financiación”. ¿Cómo? Exigiendo el pago al contado, el adelanto de un determinado porcentaje o realizar algún tipo de descuento por el pago anticipado para evitar así tensiones de tesorería.
5. Aplaza el pago a proveedores
Tal y como hemos comentado, los clientes también pueden convertirse en fuentes de financiación, unas veces porque podemos establecer tiempos de pago y otras veces porque se puede negociar con ellos los pagos. En general todos los proveedores permiten el pago a 30 días, pero si se tiene buena relación con ellos, estos tiempos pueden ser mayores. En este sentido debemos tener claro cuánto tiempo vamos a necesitar para recuperar la inversión realizada para poder establecer las condiciones de pago.
No existen fórmulas para evitar la quiebra pero para evitar problemas de tesorería es fundamental tener una buena previsión, establecer una planificación de ingresos y gastos, porque una idea brillante por sí sola no es garantía de éxito.
Por IDF ALL FINANCING
Para más información: info@idf-af.com
